El primer fichaje del Celta para la próxima temporada tiene pedigrí. Tal como lo definió el director deportivo celeste, Quique de Lucas llega para «convertirse en uno de los futbolista que asuman el liderazgo de la plantilla» y como tal es el primer abanderado del proyecto para ascender que quiere realizar el club vigués.
De Lucas llega con la carta de libertad en el brazo, tras finalizar su contrato con el Cartagena, y firma con el Celta para las dos próximas temporadas con opción a una tercera.
El próximo mes de agosto cumplirá 32 años y viene de realizar una gran temporada en el club albinegro, que ha estado luchando por ascender a Primera hasta el último momento. Ha sido el segundo máximo goleador del equipo con once tantos a pesar de jugar en ambas bandas, tras los 20 que sumó Toché.
El mediapunta catalán se formó en la cantera del Espanyol, club con el que jugó en Primera División y ganó una Copa del Rey. Posteriormente se fue cedido al Paris Saint Germain, antes de irse traspasado al Chelsea, convirtiéndose en uno de los primeros fichajes de Abramóvich.
Regresó al fútbol español para jugar en el Alavés durante cuatro temporadas. Tras el descenso del club vasco recaló en el Murcia, donde pasó dos años malos. Esta campaña ha vuelto a ofrecer sus mejores virtudes en el Cartagena.
«Vengo a pelear para llevar al equipo a la Liga de las Estrellas», fueron sus primeras declaraciones realizadas a través del club vigués. Asegura que la decisión fue fácil para él. «En cuanto hablé con el Celta y me explicaron el proyecto no me lo pensé», añade De Lucas.
El director deportivo del Celta, Miguel Torrecilla se mostró «muy orgulloso de que Quique haya apostado por un proyecto en el que competíamos con equipos que le querían de Primera División y extranjero» y destacó que este jugador era una «opción número uno para nosotros».
Sin dar cifras sobre su salario reconoció que es un jugador de «caché» aunque destaca que su fichaje no afecta a la media de la plantilla ya que muchos jugadores tienen fichas muy bajas.
De Lucas es el primero de los tres fichajes de carácter ofensivo que pide el técnico, Paco Herrera, para reforzarse antes de iniciar la pretemporada.
Es un jugador con mucho gol y que va bien en el balón parado, además de poseer un buen lanzamiento de fuera de área y destaca en el desborde uno contra uno. Puede jugar en ambas bandas y como mediapunta por detrás del delantero centro.
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